¿Sabías que la palabra “sofá” tiene su origen en la palabra árabe “súffa” que significa “almohadón”? Un sofá es, básicamente, un mueble utilizado para dormir y sentarse confortablemente una o más personas. Sus funciones han ido evolucionando con el paso del tiempo, hasta convertirse en un elemento esencial en la decoración de interiores. A continuación analizamos el origen de este mueble y su evolución hasta consolidarse como un mueble imprescindible en todo hogar.
Origen y evolución del sofá
¡El primer sofá se originó en Egipto hace miles de años! Su función era la de elevar y favorecer el confort de los reyes de la época, los únicos que tenían el privilegio de utilizarlo. En su origen, los sofás eran clave para evitar el contacto de los reyes con el suelo, permitiendo que pudieran tener los pies más elevados que la tierra y gozar de una posición de superioridad.
Tras la edad media los romanos heredaron este mueble y popularizaron su uso. Las familias con mayor poder adquisitivo disponían de sofás en su comedor o triclinum, colocados en los alrededores de la mesa para poder descansar, charlar y compartir mientras comían. Los ciudadanos de a pie no disponían de este tipo de privilegios, por lo que tenían que descansar en el suelo sobre alfombras y tapices.
Fue con la llegada de la industrialización cuando el sofá se convirtió en un indispensable de todo hogar, gozando de una gran popularidad entre la población. En la actualidad es un mueble imprescindible, y su función es muy variada: para descansar cómodamente, ver la televisión y como elemento central de la decoración de un salón.
Así eran los primeros sofás
Los primeros sofás estaban confeccionados de madera densa y tenían un peso de 50 kilos aproximadamente. Su estructura estaba construida a través de un gran armazón de madera, que por lo general solían ser de pino. Contaban con asientos con cubierta de cincha de nea, resistente y de sentada dura.
En su origen lo sofás incorporaban unos cojines pequeños, elaborados con rellenos muy variados. Con el paso del tiempo, los cojines de los sofás fueron aumentando su tamaño y ganando popularidad por su comodidad .
La evolución del sofá con el paso del tiempo
La década de los 60 marcará un antes y un después en la evolución del sofá, hasta convertirse en el clásico sofá que conocemos hoy en día. En aquella década se implantaron Importantes avances en su diseño, material, tamaño y color, lo que claramente tuvo un impacto en la manera en que se decoraban los hogares de la época. Ahora se valoraba la comodidad y flexibilidad de este mueble, que ayudaba a crear un ambiente más relajado en los hogares. El sofá se convirtió así en un símbolo de modernidad, que definía el buen estilo de vida de las familias que tenían uno.
La historia muestra cómo el sofá ha ido evolucionando y ganando protagonismo con el paso de tiempo. Lo cierto es que, hoy en día, no podemos imaginar un hogar sin un buen sofá en el que descansar y compartir tiempo de ocio con la familia y amigos. En Moradillo amamos este mueble por encima de todo y, desde 1972, nos dedicamos a crear sofás de diseño con una calidad extraordinaria.