
04 Mar Tejidos naturales: ¿cómo elegir el más adecuado para un sofá?
A la hora de elegir un sofá, el material de su tapizado es igual de importante que su aspecto o diseño. Apostar por tejidos naturales para un sofá tiene muchas ventajas y la principal es la sostenibilidad, una tendencia que viene pisando fuerte en el 2021 pero que lleva ya unos años gestándose. Te contamos cuáles son los principales tejidos naturales para tapizar los sofás y sus características para que escojas el que mejor se adapte a ti y tu estilo de vida.
Lana: resiliencia en dos sílabas
La lana es una de las fibras naturales más cotizadas para los tapizados ya que es un gran aislante térmico y tiene una gran capacidad para absorber la humedad. Es un tejido de gran elasticidad con propiedades bactericidas y de superficie repelente que apenas se arruga.
En el último año los sofás y butacas de lana bouclé con aspecto rugoso se han puesto muy de moda, convirtiendo la artesanía en un símbolo de elegancia.
Eso si, en cuanto a sus cuidados hay que controlar la temperatura de lavado ya que puede llegar a encoger si ésta es demasiado elevada y procurar secarla sobre superficies planas para que no se deforme. Por eso es vital revisar siempre la etiqueta de lavado de tu sofá y seguir las instrucciones indicadas por el fabricante.
Algodón: la prueba definitiva
¿Quién no ha escuchado antes eso de “la prueba del algodón”? Y es que esta fibra es de lo más versátil y fiable. Entre sus propiedades destaca la durabilidad, resistencia y absorción, además de la suavidad y la permeabilidad. Gracias a la homogeneidad de la fibra tiene una elasticidad y resistencia que mantendrá la superficie de tu sofá protegida.
Una gran ventaja de este tejido sobre otros es que admite una gran variedad de procesos y tratamientos, aunque se arruga con mayor facilidad.
Lino: frescura asegurada
De las fibras naturales más sostenibles que hay, del mismo modo que el algodón está principalmente compuesto por celulosa y por tanto es un tejido biodegradable. Otra de las características que comparte con el algodón es la absorción. Esta fibra puede llegar a absorber hasta un 20% de humedad sin afectar a su tacto seco, además de ser antibacteriano.
Aunque sea un material relativamente delicado en cuanto a cuidados, ya que requiere de cierto mantenimiento y se arruga con facilidad, su resistencia a la rotura es de casi el doble que la del algodón.
Seda: lujo y brillo
Famosa por su tacto liso, suave y sedoso, la seda es un tejido muy cotizado en moda y en decoración de interiores. La estructura de la fibra hace que se refleje la luz en diferentes ángulos, lo que le aporta su característico brillo natural. Al ser una fibra de un único filamento los tejidos de seda son de una gran resistencia y aunque posee elasticidad, ésta es moderada y puede llegar a deformarse si se estira demasiado.
Sin duda alguna, aporta una hermosura y elegancia únicas pero los cuidados que requiere para mantenerse así son delicados. Debe lavarse siempre a mano y mantenerla alejada de la exposición solar directa ya que puede hacer que adquiera un tono amarillento de desgaste.
Cuero: duro de roer
No se trata de una fibra, pero si de un material natural utilizado como textil en diversas industrias. En cuanto a resistencia hay pocos materiales de origen natural que puedan superar al cuero. Resiste el desgarro, la punción y el roce. Además, es elástico y un buen aislante térmico.
Para sus cuidados hay que seguir los mismos que seguirías con unas botas de cuero: limpiadores específicos para este material y un paño suave.
Personaliza tu sofá con cualquiera de estos tejidos naturales, revisa nuestro catálogo para escoger el tapizado que desees y nosotros nos encargaremos del resto. Disponemos de tejidos con un mínimo de 50% de fibras naturales en su composición o con más del 70% que cuentas con certificaciones Oeko-Tek o Reach con el distintivo de ECO. Si dudas contáctanos y estudiaremos contigo la mejor opción.