El sofá es una de las piezas más importantes de un hogar, el lugar ideal para tomar un tiempo de descanso y relajación así como disfrutar de momentos especiales con amigos y familiares. Por ello, un buen mantenimiento del sofá es primordial para asegurarte de poder disfrutarlo y garantizar su durabilidad.
A continuación os damos las claves para alargar la vida útil de tu sofá Moradillo y poder disfrutar de la calidad y confort de cada una de nuestras piezas.
Mantén una limpieza regular de tu sofá
Lo recomendable es semanalmente aspirar tu sofá y ahuecar los cojines para mantener la forma de estos. Por otro lado, y una vez al mes, se debe realizar una limpieza en profundidad de la tela del sofá, con un poco de jabón neutro, agua y un paño. En el caso de que tu sofá sea desenfundable, es mejor quitar las fundas y lavarlas en la lavadora (según las indicaciones del tejido).
Es muy importante si tu sofá es de piel utilizar productos específicos ya que este tipo de tapizado requiere de mayores cuidados. Esto te garantizará su durabilidad y mantenimiento en perfecto estado. En anteriores entradas de nuestro blog podrás encontrar más consejos relacionados con el mantenimiento de los sofás de piel.
Evita las exposiciones al sol
Exponer tu sofá al sol de forma constante o incluso de manera permanente puede provocar decoloraciones y daños del tejido. Muchas veces nuestro sofá está colocado justo debajo de una ventana y no somos conscientes de su gran exposición al sol.
En este caso, te recomendamos protegerlo desde el inicio para evitar daños mayores. Una buena opción es colocar una funda protectora para evitar el desgaste original del tejido por los rayos del sol. Colocar almohadas decorativas o cojines también ayudarán a evitar un desgaste más acelerado del sofá y mantenerlo en perfecto estado.
Haz buen uso de tu sofá
Saltar encima de este o sentarse en los reposabrazos puede dañar su estructura. Este tipo de actividades hará que se ejerza presión y fuerza en la estructura del sofá de forma brusca, lo que puede llegar a provocar que este ceda y su forma se vea modificada y/o dañada permanentemente.
Por otro lado, comer o beber en el sofá puede provocar manchas inesperadas en la tapicería del sofá. Fumar en él tampoco está recomendado, ya que el tabaco dejará olores en los cojines, así como el riesgo de la caída de ceniza o incluso llegar a quemar la tapicería.
Ahueca y ventila los cojines del sofá
El sofá es un lugar en el que podemos pasar largos periodos de tiempo, por lo que los cojines muchas veces acaban acomodándose a nuestro cuerpo y obteniendo la forma de este.
Un proceso que ocurre habitualmente en los sofás de sentada blanda, ya que su composición de fibra y picado de goma es propensa a moldearse con mayor facilidad que los de sentada firme, confeccionados con un gran bloque de goma.
Es por ello que al igual que estamos acostumbrados a ahuecar las almohadas debemos hacerlo con los cojines del sofá, asegurándonos así de mantener la forma original de estos. Ahuecando cada una de sus partes podrás redistribuir las fibras del sofá evitando los bultos o deformaciones. Además, ayudará a ventilar los cojines del sofá, evitando la acumulación de polvo en la tapicería del mismo.
Estos son algunos de los consejos generales para conseguir un buen mantenimiento de tu sofá Moradillo. Así mismo, cada tejido, relleno y estructura es diferente y requiere de unos cuidados específicos. Nuestro equipo de Moradillo estará encantado de asesorarte sobre el mejor mantenimiento del sofá que elijas de entre nuestro catálogo. ¡Te esperamos!